Quantcast
Channel: Úrsula Corberó Blog Oficial
Viewing all 36 articles
Browse latest View live

Úrsula Corberó, otra fan más de la MBFWM.

$
0
0
La Mercedes Benz Fashion Week Madrid pone fin a esta edición a la que no han querido faltar muchas celebrities. El domingo, Teresa Helbig presentaba su nueva colección primavera-verano y, como era de esperar, Úrsula Corberó asistió al desfile. Con una minifalda negra de cuero y el bolsito del mismo color, rompió el look con una blusa de la diseñadora dándole un toque muy chic y femenino. En el front row del desfile coincidió con su compañera y amiga Macarena Gómez.




Al que tampoco quiso faltar fue al desfile de la diseñadora María Escoté. Úrsula Corberó pasó un divertido desfile al lado de sus amigas Rossy de Palma y Bibiana Fernández, quien no pararon de comentar todos los diseños desde el front row. Úrsula Corberó vistió con un look total black y una chaqueta de cuero rosa de María Escoté.








Úrsula Corberó, vestida por Chanel para su gran fiesta.

$
0
0
Úrsula Corberó fue una de las invitadas a la fiesta de Chanel, que se celebró el pasado jueves como motivo de la nueva apertura de la firma en la calle Ortega y Gasset de Madrid. En la Casa de Velázquez, lo único que se veía era glamour en cada uno de los invitados de la fiesta, por lo que Úrsula Corberó se quiso destacar con un look muy elegante: una falda gris tobillera y una blusa de estilo barroca. 



Úrsula Corberó te enseña a llevar el (nuevo) gótico. | Revista Telva Belleza.

$
0
0
¿La clave? Trazos rotundos de eyeliner, sombras smokey y uñas de un oscuro azabache. La actriz catalana Úrsula Corberó, nuestra chica de portada, interpreta, de la mano de Maybelline NY, tres looks de inspiración gótica, la tendencia a seguir.

A los cinco años ya sabía que quería ser actriz. "Mi padre me pedía un dibujo y le hacía una cámara de cine", y desde que se dió a conocer en la serie "Física o química", la actriz Úrsula Corberó (Barcelona, 1989) no ha tenido un minuto de descanso. Tras participar en ocho series -la última, "Anclados"- y siete películas- "Perdiendo el Norte" y "Cómo sobrevivir a una despedida" son las más recientes- espera el estreno de su último trabajo, "La Corono Partida", con Irene Escolar y José Coronado, donde interpreta a Margarita de Habsburgo, para redondear su año más frenético. "Me fascina interpretar a esta mujer tan resuelta, tan directa, manejando el lenguaje de otra época y vistiendo esos maravillosos vestidos del siglo XVI".


+Tres comedias consecutivas en un año, ¿qué has aprendido?
-Al principio no estaba muy familiarizada con el acento, pero me he dado cuenta de que la comedia es matemática pura y dura. No se improvisa y exige una precisión tan brutal... es facilísimo quedarse corto o pasarse (yo soy de las que me paso) pero las he disfrutado mucho. Lo más difícil es el principio, aprender a soltarte. Y medir los silencios ¡son cruciales!

+Tu vena dicharachera te habrá ayudado mucho...
-Bueno, soy bastante descarada, es verdad, y me gusta reírme de mí misma. De cara a la gente suelo tener una sonrisa aunque, a veces, cuanto mejor humor muestro, peor estoy por dentro. Luego llego a casa y ¡claro! me da un bajón que no veas. Lo que tengo que hacer es administrar bien mi energía porque llevo muy mal los parones.

+¿Qué actores cómicos tienes como referencia?
-Siento devoción por Cameron Diaz. Me fascina su habilidad para hacer las cosas más locas que se le pasan por la cabeza con tanta gracia. También me gustan Jennifer Lawrence y Zooey Deschanel.

+Cuando te ves en pantalla, ¿te metes mucha caña?
-Antes lo hacía y lo pasaba fatal, hasta que me dije: "Úrsula, esto no puede ser, tienes que aprender a ser objetiva y disfrutar más". Y en eso estoy. Lo que sí hago es fijarme mucho en mis miradas y en mi voz.

+¿Qué papeles esperas?
-Me gustaría enfrascarme en un rodaje de tempo lento, que me permita recrearme en mi personaje, prepararlo con calma... aunque no sea tan comercial. En realidad no me gusta cerrarle puertas a nada.

+¿Eres de pedir consejo?
-Sí, he preguntado muchas cosas en mi vida pero también me fío mucho de mi intuición.

+¿Y a quién preguntas?
-A mi madre, que me conoce mejor que nadie, a mi mejor amiga... Sé que siempre me van a dar un consejo sincero.

+Y como espectadora, ¿eres muy selectiva?
-Sólo pido una historia bien contada, que me arrastre de principio a fin. Lucy, protagonizada por Scarlett Johansson, es la última que lo ha conseguido. De hecho, cuando me preguntan que qué personaje me gustaría hacer, digo: ¡Lucy!

+¿Cómo lidias con la fama?
-La verdad es que llevo una vida de lo más normal. Cuando cierro la puerta de mi casa no hay nada de ese glamour que la gente asocia a este oficio. Mi vida es mi familia, mi trabajo, mis amigos, mis viajes... Todavía me cuesta entender qué interés tiene dónde paso las vacaciones, pero mientras me respeten y no se inventen cosas, no me quejo.

+Cuando hace un año se hizo pública tu relación con Andrés Velencoso, te convertiste en carne de paparazzi. Ahora ya no os escondéis.
-A ver, no me gusta hablar mucho de esto, pero no es por hacerme la interesante, ¿eh? Si no cuento detalles de mi vida es por pudor. Necesito ir a mi ritmo y proteger una parte de mi intimidad, por mi cabeza y mi corazón, pero tampoco voy a darle más importancia de la que tiene. Lo que sí puedo decir es que Andrés es estupendo y que tiene mucho talento.

+Él reconoce que tú le ayudas mucho en su carrera como actor.
-Bueno, es normal. También él me ayuda a mí a repasar guiones, nos damos la réplica... ¿Qué si me gustaría trabajar con él? Claro que sí.

+Por cierto, ¿cuáles son tus armas de seducción?
-No tengo armas de seducción; es más, cuanto más me empeño en seducir, peor me va.

+Algo menos conocido es tu pasión por la moda, incluso has abierto una tienda en plena milla de oro de Madrid.
-La tienda se llama Ursulolita (Calle Claudio Coello, 81), que es el nombre que uso en mis redes sociales, y la ropa que vendo es como yo: variada, práctica, y con un toque bohemio.

+Nuestro mapa político ha dado un vuelco, ¿te interesa?
-Mucho. Estoy al tanto de lo que pasa, leo la prensa todos los días. Y no, no me dan miedos los cambios.

+Recomiéndanos una canción y un libro.
-"La decisión de Sophie", "Single Ladies" de Beyoncé y "El abuelo que saltó por la ventana y se largó" de Jonas Jonasson.

+Este año eres nuevo rostro de Maybelline NY, ¿qué te atrae de esta firma?
-Que es joven, divertida y cool, además de estar repleta de productos innovadores que me hacen ganar confianza en mí misma. ¿Mis últimos descubrimientos? La máscara Lash Sensational; es ponérsela y ¡pestañón!, y la barra de labios nº 135 de Maybelline NY en un tono borgoña que me entusiasma.

+Por cierto, ¿te atreverías a lucir algunos de estos looks góticos con los que has posado hoy?
-¡Claro que sí! Últimamente me ha dado por ahumar los ojos en tono bronce y marcar intensamente las pestañas con eyeliner y doble capa de máscara negra. En la boca, suelo optar por tonos corales.

+¿Un capricho de belleza?
-Hacerme la manicura o un tratamiento facial. Todo lo que sea mimarme me hace sentir bien. Luego está el gym, el pilates, el baile, que es mi truco secreto para desconectar y descargar adrenalina... también la alimentación sana. Yo me tomo unas judías verdes con aceite o un pescado a la plancha y ¡feliz!

+¿Un truco beauty que hayas aprendido en el cine?
-Mezclar varios tonos de maquillaje para contornear mi rostro. Por ejemplo, aplicar un color más claro como base y otro más oscuro en los pómulos para resaltar las facciones.

+¿Tu próximo destino de vacaciones?
-Nueva York, para perfeccionar mi inglés, y alguna isla. Por ejemplo, Menorca.

+¿Un plan para el viernes por la noche?
-Dos opciones: o quedarme pantingada en el sofá o sesión de cine en los Renoir, (sin palomitas y en versión original) y cena relax en el restaurante japonés Miyama (Flor Baja, 5). Hacen un tartar de atún con cítricos para chuparse los dedos.

Escribe: Isabel Ribada
Realiza: Gabriella Naeve
Fotos: Antonio Terrón

Úrsula Corberó: "Me gustaría muchísimo hacer cine independiente, mostrar una faceta más seria de mí" | Revista Hola

$
0
0
Más madura. Más sofisticada. Así vemos a una Úrsula diferente, que no ha dudado en transformar su imagen para descubrirnos tres de los looks de maquillaje más actuales de la mano de Chanel. Un cambio que revela a una joven muy madura, dispuesta a dar un salto cualitativo en su carrera. "Me gustaría muchísimo hacer cine independiente y mostrar una faceta más seria de mí. Me encantaría que confiaran en mí para mostrar ese lado serio que también tengo". Experiencia y oficio no le falta. ¡Lleva dos décadas trabajando! "Tengo veintiséis años y llevo veinte trabajando y cotizando, desde mi primer anuncio. ¡Qué fuerte, a veces me resulta increíble!"


+Ahora, Andrés (Velencoso) tu pareja, también se ha iniciado como actor. ¿Le das consejos?
-Con él hablo mucho de trabajo, como todas las parejas. Le saco ventaja como actriz porque él hasta ahora no había pensado en ser actor, pero él me lleva muchísima ventaja en cuanto a carrera y en cuanto a metas: Andrés ha llegado muy lejos. Él me encanta como actor: lleva poco tiempo trabajando y tiene un talento natural increíble.

+¿Por qué te dan tantos papeles de "pija" cuando no lo eres?
-(Risas). ¡Eso me preguntaba yo el otro día! Andrés me respondió que es porque lo hago muy bien, así que ¡con eso me quedo!

+¿Es verdad que la fama se acrecienta al estar con alguien también muy popular?
-Es cierto que se duplica... En mi caso, paso más desapercibida porque soy menudita, pero Andrés lo tiene más complicado porque mide más de un metro noventa.

+¿Cómo es tu tienda de ropa, Ursulolita?
-Creo mucho en las energías, en la química entre las personas y también con los ambientes, y tuve un flechazo con el local. Lo elijo todo personalmente y cada vez entiendo mejor a la clientela.

+¿Cómo es ser empresaria?
-¡No lo sé! Tengo cero dotes para ello, ¡cero! De hecho, gestionar el lado económico es lo que peor llevo. Soy un poco inconsciente en cuanto al dinero: no le doy mucho valor, ni es mi meta ni mi objetivo.

+Un actor debe ser previsor...
-Es cierto. Mi madre, que es ahorradora y cuidadosa, se pone histérica conmigo. Pero yo me buscaría la vida, sin duda. A mí no se me caen los anillos por trabajar en lo que sea. El dinero es importante solo para lo que es.

+¿Por ejemplo...?
-Yo vengo de una familia muy humilde, y a veces tengo que ayudarla.


+Qué gusto poder hacerlo.
-Sí, sí. Es muy placentero. Es bonito poder comprar una cama a tu abuela.

+Creo que quieres muchísimo a tus dos abuelas...
-¡Las adoro! Son coquetas, presumidas, son divinas. Con ochenta y tres años y sus sombras de ojo color plata y sus manos perfectas. Eso lo he aprendido de ellas: ¡siempre tengo que llevar las manos impecables!

+¿Cuál es tu mayor miedo?
-Tengo bastantes... Todos los tenemos, ¿no? Me da un poquito de respeto el rechazo. Quizás por eso quiero estar siempre bien con todo el mundo.

+¿Te han roto alguna vez el corazón?
-Sí. Roto, roto, pero bien roto. Roto, roto, de morir. Pero no quiero que eso me haga blindarme: prefiero seguir siendo como soy, y lo que tenga que pasar, pasará. Cuando me lanzo, lo hago de cabeza y me entrego, en todos los aspectos de mi vida. Yo lo doy todo.

+Aquí luces tres looks muy diferentes, ¿qué es para ti el maquillaje?
-Es un arte: hace muchos años que me maquillan, y sigo descubriendo cosas nuevas. Me gusta y me divierte maquillarme. Y en las pestañas me pongo máscara hasta para ir al gimnasio. Ha sido curioso verme en un look con los labios muy rojos y sin gota de máscara. En general, me gusta todo lo que deje la piel jugosa y fresca.

Reportaje: Revista Hola
Texto: Stefanie Milla
Fotos: Antonio Terrón
Maquillaje: Iván Gómez para Chanel
Peluquería: Paula Soroa
Estilismo: Blanca J. de la Hoz
Localización:Estudio María Lladó

Úrsula Corberó, nuevo look en los Neox Fan Awards 2015

$
0
0
La alfombra naranja se extendía ayer a lo largo del Palacio Municipal de Congresos de Madrid para celebrar la cuarta gala de los Neox Fan Awards. Entre numerosas celebrities del mundo del cine, la televisión y la música, Úrsula Corberó asistió a estos premios tan locos por su nominación a mejor actriz protagonista en 'Cómo sobrevivir a una despedida', aunque fue Charlotte Vega quien resultó ganadora. Úrsula eligió un look, en el que la prenda fetiche era la falda y la chaqueta de cuero, combinado con un jersey blanco y unos stilettos de tachuelas.






Úrsula Corberó celebra la gran fiesta de cumpleaños de Steve Madden

$
0
0
La firma Steve Madden cumplió anoche 25 años y han querido celebrarlo con Úrsula Corberó como la anfitriona perfecta de la fiesta. Úrsula Corberó llegó al local de moda con un look en el que recreaba el estilo de las míticas Spice Girls: jersey rosa, vaqueros de talle alto y botines de Steven Madden. El peinado fue lo que dio el toque al outfit. Pepino Marino y Crawford fueron los DJ's que se encargaron de animar la fiesta. 






Úrsula Corberó, la presentadora más sexy del desfile de Women's Secret

$
0
0
Anoche Women's Secret realizó un desfile en la Sala La Riviera de Madrid con Elsa Pataky para dar a conocer la nueva colección de la marca. Úrsula Corberó se encargó de presentar el show mientras que Malena Costa y Desiré Corderó, entre otras, desfilaban muy sexys por la pasarela. Para la ocasión, Úrsula Corberó vistió un traje blanco combinado con un body color vino, a juego con sus labios. Sin duda, la más elegante de las invitadas.




Úrsula Corberó y su twerking en Pasapalabra

$
0
0
Bailando, cantando y riendo: así se lo ha pasado Úrsula Corberó en Pasapalabra. La actriz ha vuelto al plató de Christian Gálvez para compartir tres tardes con Pablo López, Laura Sánchez y Christian Sánchez. Lo más divertido de estos programas ha sido que Úrsula Corberó ha enseñado a hacer twerking a Christian Gálvez y a Christian Sánchez.



En forma... con Úrsula Corberó y Silvia Alonso

$
0
0
Úrsula Corberó sabe mejor que nadie que una de las prioridades para estar sana es hacer deporte. Lo que tiene claro es, que para pasárselo bien, qué mejor que la compañía de una amiga. Por ello, ha hecho un vídeo con su amiga y actriz Silvia Alonso enseñando distintos ejercicios que multiplican la energía y el rendimiento en pareja.







Una semana en el armario de... Úrsula Corberó | Revista Vogue

$
0
0
DÍA 1
Es actriz, tiene un blog, tiene una tienda, y a veces, hasta vida social. Y tiempo para imaginar qué pasaría si un día tuviera una discoteca... Así es ella: divina. 


De pronto, la conversación da un giro maravilloso y Úrsula, emocionada, empieza a contemplar la posibilidad de ser dueña de una discoteca. A ver, todo tiene un porqué: la cosa ha empezado hablando de moda (esto es Vogue y estos son sus 7días/7looks, ¿qué esperabas?), ha continuado con música (si eres seguidor de Vogue, sabrás que esto es fun-da-men-tal), y ha terminado en series de televisión (una cuestión innegociable en esta santa e-casa). Ahí han aparecido Girls & Lena Dunham (Úrsula la venera, la adora, la admira y la ama), Dexter & Michael C. Hall (con el que tiene una relación muy parecida a la que mantiene con Lena Dunham) y Los Sopranos. Ésta la tiene pendiente, pero el personaje de Adriana sale a colación y con ella, la historia de ese capítulo en el que Christopher le compra una discoteca para que haga realidad uno de sus sueños: poseer un club y organizar la programación musical.

"¡Buahhhh!", exclama Úrsula, alargando mucho la 'a', presa de la emoción. "¡Eso sería lo máximo!", dice con vehemencia, "con lo que a mí me flipa bailar. Así pondría toda la música que me gusta y el público sería súper cool...". Entonces deja de hablar y retoma la conversación muy seria: "Pero, a ver, soy actriz. Tengo un blog, tengo una tienda, y a veces, tengo vida social." Entonces estalla en su carcajada tan reconocible y concluye muerta de risa: "No, creo que, de momento, no voy a poder tener una discoteca." Eso sí, vuelve a insistir en que le parece una idea 'divina'.

"Divino" es un adjetivo que Úrsula utiliza constantemente. Lo pronuncia y lo usa con una entrega que es realmente efectiva. Cada vez que asegura que algo o alguien lo es, lo dice con tanta pasión que tú también lo piensas. Hoy, por ejemplo, hablando de vaqueros perfectos -ella cree firmemente que los que lleva en estas fotos lo son y los tiene en varios tonos-, recuerda unos de su adolescencia que fueron "los primeros que me compré a mi gusto. Eran de killah y eran los mejores del mundo. Me los puse tanto que se empezaron a romper y mi abuela, que es modista, me los remendaba una y otra vez. Una vez, mi perro Blue, que era un mastín mezclado con husky, me arrastró por toda la calle mientras perseguía un gato. Ese día, supuso la defunción de esos vaqueros. Pero nunca los tiré, y aún los conservo porque eran... divinos de la muerte." Y una, aunque nunca tuvo la oportunidad de verlos, sabe que lo eran. Casi tanto como ella.

DÍA 2
Para la actriz, la ropa es algo más que llenar armarios. Para ella es una manera de coleccionar momentos y visualizarse en diferentes momentos de su vida.

¿Qué ves cuando miras la ropa que cuelga silenciosamente en tu armario, la que reposa dócilmente en tus cajones y la que te desafía rebelde sobre una silla? ¿Qué sientes cuando pasas la mano por tu abrigo favorito, cuando te abrochas tus vaqueros más antiguos y cuando te zambulles en tu jersey más cálido? Úrsula Corberó demuestra una vez más porque es tan divina y responde: "Para mí, mi ropa son momentos." No, no se trata de unos jeans viejos, un jersey de punto imperfecto o una camiseta que ha perdido la forma por el paso del tiempo. No, tampoco se trata de prendas con un valor económico por el nombre que lleva bordado en la etiqueta. Son exactamente esto: momentos.

Hay que tener una sensibilidad especial para pensarlo, para expresarlo y para vivirlo. Por eso, Úrsula Corberó es algo más que actriz, blogger o empresaria: ella es una narradora excepcional de historias. No importa cuál te cuente porque siempre lo hace de una manera hipnótica; sabe modular la cadencia y el ritmo de la voz como pocas, e incluso puedes notar cómo sonríe a través del teléfono. Es más: por esa coreografía que siguen su voz y su cuerpo cuando narra algo, puede saber que está moviendo las manos, la cabeza, las piernas.


Es lo que pasa ahora mismo. Úrsula está contando con detalle cómo es su vestidor y consigue que parezca una secuencia de una película de Wes Anderson. "Tengo una habitación enorme con cuatro armarios aún más enormes. Uno está lleno de jerséis, otro de camisetas, otro de ropa de deporte y gafas de sol, y otro de zapatos. Luego está mi colección de sombreros, tocados y turbantes, que merece mención aparte. ¿Os he contado que mi familia me llamaba Doña Sombreros? Con un mote así os podéis imaginar lo obsesionada que estaba con ellos. Venga, lo voy a confesar: tengo demasiados zapatos. Sí, quizás más de 60 pares. Y sí, hay muchos que dudo mucho que me vuelva a poner... pero no los voy a tirar. Hay pares que con solo verlos es como visualizarme cuando tenía 18 años y los llevaba sin parar. Porque la ropa, para mí, no solo es prendas y accesorios. Son momentos.


DÍA 3
Ella tiene una cajita de música que sus padres le trajeron de Viena y que es su amuleto. Dentro, hay grandes tesoros: los primeros pendientes que su abuela se compró con su dinero.

"Espera, te la voy a poner para que la escuches", me dice Úrsula casi susurrando. Por su tono de voz, yo sé que está a punto de empezar una de sus historias cotidianas que ella convierte en increíbles. Escucho cómo suena ese sonido inconfundible que hace una llave metálica, diminuta, al girar sobre sí misma mientras se la utiliza para dar cuerda a una caja de música. Clac, grita secamente. Y Úrsula murmura: "Mira, mira, esto es lo que te decía". Y, en realidad, el verbo correcto es mirar, más que escuchar. Porque ella recrea las situaciones con tanta habilidad que es como si pudieras ver los escenarios, aunque no los hayas visto nunca y, probablemente, nunca los verás.

La caja -aunque ella siempre que se refiera a ella dice cajita para que quede claro no tanto que es pequeña, sino cuánto amor le tiene- emite la banda sonora oficial de las cajas de música: esas que, como dice Nacho Vegas, son muchas veces difíciles de parar. Una melodía desencadenada y metálica se adueña de la conversación, y uno piensa, irremediablemente, en diminutas bailarinas de plástico con tutús microscópicos que están condenadas a bailar para siempre esa canción siempre que alguien les dé cuerda y levanta la tapa de su cárcel de madera lacada. Siempre listas para la función, siempre preparadas para no equivocarse ni una sola vez al dar vueltas y vueltas, con los brazos en alto.

"Me la trajeron mis padres de un viaje a Viena y es mi amuleto. ¿Cómo podría describirla? Pues es... divina. Dentro he guardado dos de mis pertenencias más preciadas: unos pendientes de brillante y un anillo. Los dos son de mi abuela y ella ha querido que los tenga. Y los dos tienen la mejor historia del mundo. Los pendientes fueron los primeros que se compró mi abuela con su dinero, son de esos chiquititos, chiquititos... con un brillantito pequeño que brilla mucho. Y el anillo fue un regalo que le hizo su primer novio, ¿te imaginas?". Úrsula se queda callada, imaginando. Y de manera insconciente le da cuerda a la cajita de música porque todos los pensamientos que ha originado ese anillo necesitan banda sonora.


DÍA 4
Si sales a bailar con ella tienes que tener una cosa muy clara: es lo que más le gusta en el mundo, lo que más feliz le hace. El baile es su terapia, su catarsis. Dicho esto, ¿bailas?

"Cuanto más triste estoy, más bailo", dice risueña Úrsula Corberó, sin darse cuenta de que acaba de elaborar una frase preciosa y llena de significado que bien podría ser el título de su autobiografía. Como no podía ser de otra manera tratándose de ella, estalla en risas cuando se lo digo y dice con energía: "¡Es que es verdad! El baile es mi terapia, mi catarsis. No hay nada que me haga más feliz que bailar y nada consigue que desconecte más que salir a bailar". ¿Y qué música consigue que la experiencia catártica sea absolutamente perfecta? "Uy, a mí ponme R&B, electro latino, 'sandungueo', dancehall... y pierdo la cabeza, y hasta me puedes ver haciendo twerking", dice la actriz.

"Eso sí, si sales a bailar conmigo eso es lo que vas a verme hacer: bailar", advierte Úrsula. "Cuando piso la pista de baile y cuando me gusta el sitio y la música que suena, me has perdido: no hablo, no me fijo en quien hay alrededor... simplemente, bailo. Y me convierto en la persona más feliz del mundo. No importa lo dura que haya sido la semana y no importa lo duro que pueda ser el día de mañana; lo único que quiero en ese momento es bailar, y bailar, y bailar..."

¿Y cuando se está arreglando para salir también baila? "No", dice tajante, "cuando me arreglo, me arreglo. Es que me flipa arreglarme, especialmente maquillarme y peinarme. Me puedo tirar 45 minutos haciendome un eye-liner más trabajado que de costumbre, iluminándome los pómulos, probando con tonos de sombra que no suelo llevar... Soy muy apañada y muy aplicada para estas cosas", sonríe. La prueba, en este jueves de sus 7 días/7 looks: en ese moñito bun perfectamente hecho/deshecho, en el rojo de labios, en el rubor de sus mejillas y en el negro de sus ojos. Hay un detalle que deja claro que esta noche ha sido brutal y que Úrsula ha conseguido hacer su catarsis favorita y es que la actriz sube en el ascensor con sus zapatos en la mano y con una sonrisa tan cansada como exultante.

DÍA 5
Dentro de 4 años, Úrsula será la mujer más feliz del mundo. Es más: se sentirá como Nicole Kidman. ¿Por qué? Porque cumplirá 30 años y su abuela tiene preparado un regalo que suena brillante...

"¿De verdad lo crees?", pregunta Úrsula con la voz triste. Es la primera vez que esto sucede en nuestra conversación y, teniendo en cuenta lo que ella transmite con su voz, impacta. Su pregunta está llena de esperanza, pero su auto-respuesta la tiñe de desesperanza. "Yo no lo creo...", niega. Hemos llegado a este punto porque está hablando de otro de los tesoros que guardó en su cajita de música, su amuleto. En ella ahora están esos pendientes de brillantes que su abuela se compró con su primer dinero, y que ha querido que su nieta tenga. Pero hubo otra joya de valor (sentimental) incalculable: el anillo que el primer novio de su abuela le regaló cuando empezaron a ir en serio. Una noche de fiesta, Úrsula lo perdió. Y ha perdido la esperanza de volverlo a encontrar, lo cual le produce una tristeza enorme.


Pero ella se la sacude de encima y empieza una de sus fantásticas historias en las que se convierte en la mejor narradora: "Mi abuela es súper ordenada y tiene mil joyitas que a mí, por supuesto, me han fascinado toda la vida. Un día le pregunté: '¿Qué es lo más antiguo que tienes?'. Ella sonrió y me pidió que esperara. Se fue, y volvió con tres anillitos. Cada uno tenía una piedra de un color: turquesa, negra y de río. Me miró, y me dio el de la piedra turquesa. Me miró y me dio el de la piedra turquesa. Cuando me lo dio yo ya había perdido el primero que le regaló su primer novio, una cosa que jamás me perdonaré. Así que guardé este con todo mi cuidado en mi cajita-amuleto. Un día, haciendo una de mis limpiezas de armario, de esas que tanto me gustan, se me cayó y casi me desmayo pensando que también lo había perdido... Pero no, ¡lo encontré! No podría soportar que me pasara otra vez. El valor sentimental que tienen estas cosas de mi abuela es incalculable, de verdad".

"Peeeeeero", y su risa habitual vuelve a adueñarse de la escena, "en cuatro años tendré la joya más alucinante de mi abuela. Es un anillo brutal, que me fascina, con el que me siento una estrella. Qué se yo, ¡me siento Nicole Kidman!". ¿Y ese plazo de cuatro años? "Lo ha puesto ella y marca una fecha muy especial en mi vida: cumpliré 30 años, y seré la mujer más feliz del mundo".


DÍA 6
Sobre mujeres sin tapujos, que se aceptan como son. Mujeres capacitadas para hacer lo que les da la gana, mujeres chiflantes. Mujeres a las que seguirías al fin del mundo.

"Lena, Lena, Lena es... una diosa. Lena es una diosa", dice y reitera Úrsula Corberó. Lena es Lena Dunham, claro. Y Úrsula se revela aún más divina de lo que ya la habíamos conocido en estos 7 días/7 looks al elevarla a la categoría de diosa. Porque hay quien dice que le gusta Lena, hay quien dice que no le gusta, hay quien dice que la ama, y hay quien dice que la odia. Pero quien dice que Lena Dunham es una diosa consigue ser elevada ella misma a la categoría de diosa automáticamente. Úrsula tuvo un flechazo instantáneo con ella mientras estaba rodando 'Cómo sobrevivir a una despedida' y recuerda exactamente ese momento en el que vio fuegos artificiales en el cielo y sintió que en el mundo no había nadie más que no fueran Lena y ella.

"Brays Efe era parte del rodaje y un día empezó a hablar de Girls. Yo le confesé que no había visto todavía ningún capítulo y él me preguntó un poco escandalizado que cómo era posible que eso fuera así. Lo bueno es que él tenía allí las dos primeras temporadas, en el ordenador, y me las ví del tirón. Y fue entonces cuando supe que Lena era una diosa". Cuando uno alcanza la categoría divina se entiende que está más allá de lo que gusta/no gusta, pero, ¿qué es lo que más le apasiona a Úrsula de Lena? "Me chifla que sea una mujer sin tapujos, que se acepta tal y como es. Quiero que sea la líder de las mujeres, ¡yo la seguiría! Ella está capacitada para hacer lo que le dé la gana... y esas son las mujeres que me gustan". ¿Cómo se dice? Son cinco letras y pronunciarlas juntas son casi una melodía: diosa


DÍA 7
De acuerdo, el domingo no es su día favorito de la semana. Pero ella sabe cómo hacerlo especial: pidiendo una hamburguesa, yendo a perseguir atardeceres y viendo películas.

Si eres seguidor de los 7días/7looks de Vogue, sabrás que los domingos ejercen un poder extraño en todas y cada una de sus protagonistas. Si hay un día de la semana que cada una persigue de una manera muy especial y al que todas atribuyen un carácter diferente, ese es el domingo. A nuestro parecer, tiene una fama injusta cuando, en realidad, es un día muy dulce y gustoso. Pero, ay, Úrsula Corberó le tiene algo de miedo. Le paraliza la idea de estar un domingo en casa sola y sin hacer nada. Solo con pronunciar los conceptos "sola" y "sin hacer nada" ya le tiembla un poco la voz y el tono se vuelve algo sombrío. "A ver... me encantaría ser más casera, pero no lo soy", dice ella. "Sola puedo estar un martes, pero un domingo ¡ni de broma! Es que solo con imaginarlo me pongo triste y eso es algo que para mí es impensable. Yo me obligo a estar bien, la tristeza no computa en mi mundo".


¿Y cómo es el domingo perfecto para Úrsula? "Idealmente, he salido hasta muy tarde el sábado, así que me levanto muy tarde. Pienso en algo que me sirva de desayuno-comida-merienda y pido una súper hamburguesa para que me la traigan a casa. Sigue una siesta y luego continua una tarde-noche viendo películas en el sofá con mi pareja. Aunque últimamente no he estado muy de salir hasta tarde los fines de semana... Es algo que va por épocas, ¿no?", pregunta pensativa.

"Otro plan que me encanta de un domingo es el de levantarme más o menos a una hora decente, quedar con amigos y desayunar tarde", propone la actriz. "Luego, seguir dando vueltas y haciendo planes por la ciudad, yendo a tomar cañas y picar algo rico, y terminar, sí o sí, en el cine viendo una película buena. Bueno, y si entre medias podemos pasar por el Templo de Debod a ver el atardecer, antes del cine, ya soy la mujer más feliz del mundo de todos los domingos del mundo entero". Y vuelve a estallar en esa constante que ha dado ritmo a estos 7días/7looks: su risa. Su divina risa.


Reportaje: Revista Vogue
Escribe: Marta Hurtado de Mendoza
Fotos: Rubén Vega
Realización: Ana Rojas

Úrsula Corberó será Ester en 'La Embajada'

$
0
0
Tras su éxito por Anclados, Úrsula Corberó vuelve a la pequeña pantalla con 'La Embajada', la nueva serie de Antena 3. Se trata de un thriller político que abordará la corrupción en España, donde Tailandia tendrá mucho que ver. Por eso, la serie se rodará entre estos países. La primera temporada cuenta con 13 capítulos, aunque la productora no descarta realizar más.


La serie contará con Belén Rueda (Claudia) y Abel Folk (Luis) como protagonistas. Úrsula Corberó dará vida a su hija Ester. En 'La Embajada' también estarán Tristán Ulloa, Alicia Borrachero, Carlos Bardem, Maxi Iglesias, Amaia Salamanca, Raúl Arévalo y Megan Montaner, entre otros. Todavía no hay fecha de estreno, pero estamos seguras de que será todo un éxito. 

Úrsula Corberó: "Ahora me siento capaz de todo, de comerme el mundo" | AISGE

$
0
0
Trabaja desde los seis años, triunfó en la tele juvenil, arrasa con la comedia y anhela mostrar su cara más desgarradora. A este paso no habrá quien la pare.


La tarde se ha puesto lluviosa y mohína, sin venir a cuento, en el corazón del Barri Gótic, pero a Úrsula Corberó (Barcelona, 1989) no es tan sencillo borrarle la sonrisa de la cara. Menos aún si la cita acontece en esas vetustas y maravillosas granjas chocolaterías de la calle Petritxol, las mismas en las que dos décadas atrás ejercía de niña golosa en compañía de sus avis. Hay días que no podría quedarse en la cama, sobre todo si amanece con un inoportuno herpes en el labio, ha olvidado en el taxi unas joyas de su abuela de gran valor sentimental y el suegro llama para anunciar que el perro le propinó un tirón y tendrán que recomponerle la muñeca en el quirófano. No importa. Úrsula, corazón y cabeza, temperamento y torbellino, puede con todo. Incluso con los quebrantos sentimentales, esa cacareada ruptura con el actor y modelo Andrés Velencoso, pocas semanas después de esta conversación.

Vendrán bien o mal dadas, pero Ursulolita, su alias en las redes sociales, no le baja tan fácilmente la mirada a la vida. Cree en ella misma, reivindica su talento mucho más de un rostro agraciado, se revuelve contra las injusticias aún asociadas en este oficio, a veces, a la condición de mujer. Lleva trabajando 20 de sus 26 años, acudía a los castings haciendo autoestop y ahora no piensa recular ni por un momento. El dueño de la granja Dulcinea la invita a suizos con nata a cambio de un selfie. Unos chavales reguapos vencen la timidez y también se fotografían con ella. Otros se quedan con las ganas, muertecitos de la vergüenza, pero ponen la oreja durante la conversación. Ella tiene sonrisas para todo el mundo. También para quien pregunta. Aunque a veces se revuelva en la vieja silla de madera antes de responder.


+¿Ese desperpajo se trabaja o venía de serie?
-Nací así y me sale fácil. Todos somos de alguna manera tímidos y yo afronto mi timidez de esta manera. La espontaneidad acaba siendo mi mejor arma. Tengo muchos defectos, sin duda, pero me considero la persona más empática del planeta Tierra.

+Vaya, eso debe de facilitarte las cosas a la hora de encarnar a sus personajes.
-Sí, porque todos tienen algo de mí. Leo un papel, investigo en mi interior y pienso: "vale, eso también lo tengo yo". Hay muchos yos dentro de cada cual, y por eso no nos comportamos igual en familia, con amigos, en pareja o charlando con el taxista. Y no soy una asesina o una psicópata, en caso de que hubiera de asumir un papel más extremo, pero también tengo mi punto de malicia.


+Igual le pide el cuerpo una cosa así, después de tanta comedia: '¿Quién mató a Bambi?', 'Cómo sobrevivir a una despedida', 'Perdiendo el norte'...
-Rossy de Palma me lo decía mucho mientras rodábamos la serie 'Anclados': Niña, tú eres una dura. Me considero una mujer sensible y vulnerable, incluso susceptible: todo me afecta muchísimo. Pero llevo trabajando desde los seis años, soy ambiciosa y quiero todos los personajes. Todas las tipologías. He aprendido a ser objetiva y ahora me siento capaz de todo. Estoy convencida. Tengo ganas de comerme el mundo.

+Habrá renunciado a mucho desde bien pequeña. ¿Ha merecido la pena?
-Es que siempre fui así. Mi padre guarda en la cartera un dibujo que hice con cuatro años, una niña frente a una cámara ¡con trípode! A los seis, mi madre tenía que pedir permiso en la pescadería para acompañarme a un casting tras otro. No me cogían en ninguno y ella me imploraba: Mira, Úrsula, te compro una Barbie pero no vamos a más. Hasta que me cogieron en un anuncio de Banco Central en el que salía con ¡unas gafas de culo de vaso!

+¡Menudo ojo clínico! ¿No era ya una niña guapa?
-Por entonces no me cogían por mi belleza más o menos exótica, sino porque tenía gracia, le echaba morro y no daba ningún problema en los rodajes. Así fue como llegué a ser imagen de Lacoste Junior durante cinco temporadas. Pero lo del sacrificio es cierto. Mis amigas, a los quince, se dedicaban a pasárselo bien, fumarse los primeros porrillos, ligar, emborracharse. Y yo no tenía oportunidad de desfasar...


+¿Ni siquiera pudo permitírselo tras la inmensa eclosión televisiva de 'Física o Química'?
-Ese ha sido mi único periodo de no pensar, de disfrute puro. Mi mejor época, la más tierna y amistosa. Fueron cuatro años de mucha eclosión hormonal: diez jóvenes guapos, con trabajo, dinero y fama, imagínese. Los fines de semana alquilábamos una casa en Segovia y Javi Calvo se disfrazaba de botones y nos escribía historias de miedo. Luego follábamos todos con todos y nadie se enfadaba. Había mucha empatía.

+Habla como si se refiriera a un pasado remoto, y tiene 26 años...
-Pero me preocupa la fecha de caducidad. Nos preocupa a todas. Esta industria es muy machista y el machismo ha dejado abundantes secuelas. Un hombre a los 50 está en el momento perfecto para follárselo, se le considera sexy aunque esté calvo o con canas. Entre las mujeres, la única excepción es Ángela Molina. Por eso también el ansia: todo ha de ser ahora, aunque sea una mierda tener que pensar así.


+¿Tanta importancia le atribuye al físico la industria actual?
-Sí, pero también me resulta machista pensar que la mujer ha de mostrar solo su parte intelectual, y no también la sexual. Nunca lo he entendido. Se puede tener un buen culo y un buen cerebro. Son conceptos compatibles.

+¿Pero la suya es una generación desfavorecida?
-Hombre, es una generación fastidiada. Hay gente igual de guapa, talentosa, carismática y formada que yo sin posibilidades de darse a conocer. Y yo misma tampoco hago lo que me gustaría como actriz. Ahora mismo estoy por encima a nivel mediático que interpretativo. Disfruto con la comedia, me encanta probar y arriesgarme en ese género, pero aún espero que alguien caiga en la cuenta de que, además de muy graciosa y divertida, puedo ser desgarradora. Seguro que a Bárbara Lennie le sucede a la inversa, se muere de ganas por un papel con el que hacer reír. Yo animo a Urbizu a que me dé un prota. Bueno, y también a Almodóvar, Daniel Sánchez Arévalo, Javier Ruiz Caldera...

+Emplazados quedan. ¡Pero no les diga que su nombre de guerra es Ursulolita!
-Jajaja. Fue una ocurrencia de una chica de vestuario en 'Física o Química', que mezcló mi nombre y el de mi perrita, Lolita. Me gustó y me sigue haciendo gracia, aunque mucha gente me diga que ya no es un nick para una mujer de 26 años. Pues ahí me ves: así se llaman mis cuentas en Instagram (635.000 seguidores) y Twitter (452.000). Y la tienda de Claudio Coello 81, que la lleva mi mamá y se le da muy bien.


+Porque Úrsula es el nombre real.
-Sí, sí. He hecho psicoanálisis mucho tiempo y mi terapeuta me insistía en que nacemos muy condicionados por el nombre. Si te ponen Úrsula, claro, no puedes pasar desapercibida. Yo iba a nacer ciega y con algún tipo de retraso, me tuvieron ochomesina y por cesárea, me envolvieron en papel de plata como si fuese un bocadillo de panceta... Pero nada, al final he salido adelante.

+Durante su relación con Andrés Velencoso, ¿usted le daba más envidia a las chicas o él a los chicos?
-¡Uf! A ver, las tías en ese aspecto pueden ser muy pesadas... y a lo mejor soy yo la que se sentía más envidiada. Él es un top model internacional, un icono y un sex symbol.



Reportaje: AISGE
Entrevista: Fernando Neira
Fotografía: Pau Fabregat

Úrsula Corberó y Miriam Giovanelli, almas gemelas | Revista Elle

$
0
0
MIRIAM GIOVANELLI Y ÚRSULA CORBERÓ: las mejores amigas.


Se completan mutuamente las frases y siempre terminan los comentarios con una mirada cómplice y a carcajadas. Miriam, la reflexiva, diurna y casera - "en realidad hiberno; en verano soy un poco más callejera", confiesa- y Úrsula, la noctámbula y polvorilla -"frena, Úrsula, frena, suele repetirme Miriam"-, se conocieron en la serie 'Física o Química' (2008-2011). Pero un verano en Cádiz, en casa de un amigo común, convirtió a las actrices en inseparables. "Nos vemos todos los días, ¡Dios mío, qué horror!", bromea Úrsula. Pese a que son como la noche y el día, existe un nexo inquebrantable entre ellas: los mismos valores y un sentido del humor idéntico. "La amistad para nosotras es respeto, confianza, y estar disponibles tanto en los malos como en los buenos momentos", dice Miriam. "Y también es la válvula de escape con la que recuperar la energía después de un día feo", remata Úrsula. Su mejor plan juntas es transformar la casa de Miriam en un cuartel general para compartir confidencias y un buen vino blanco. "Y mis menús, que siempre soy yo la que cocina", Úrsula 'dixit'.


La cuenta atrás de Úrsula Corberó para los Premios Goya | Harper's Bazaar

$
0
0
La actriz se adentra en el espacio orquestado por la Academia de Cine para elegir el vestido perfecto en la ceremonia de este sábado. Seguimos de cerca sus pasos.


En la calle Zurbano, a escasos metros de una sede del Partido Popular trufadas de furgones de policía, entran y salen cajas enormes con nombres españoles gravados en su frontal. Angel Schlesser, Santos Costura, Roberto Diz o Teresa Helbig son algunas de las etiquetas que acceden al hall central de la Academia de Cine, que estos días reciben a puñados de sus actores en vistas de la inminente ceremonia de los Premios Goya. Nos recibe a sus puertas Úrsula Corberó (Barcelona, 1989), que el sábado recorrerá la alfombra roja del Hotel Auditorium frente a los ojos de un centenar de fotógrafos y cuatro millones de espectadores. "Sin presión, ¡eh!", bromea sobre las vueltas que le ha dado a su vestido final. Aunque prefiere desvelarlo cuando sea el momento, promete dejar atrás la bisoñez de aquel modelo amarillo firmado por Teresa Helbig con el que se estrenaba en 2015.

Corberó llega junto a Belén Rastrollo, su estilista para esta ocasión, con la que comenzó a trabajar para los premios Neox del año pasado. "Úrsula suele tener bastante claro lo que quiere, yo soy la guía para conseguir que sea lo más ajustado a sus ideas", concede. Ambas han llegado a lo interior de lo que se ha bautizado como showroom de la Academia, una suerte de sale donde actores e invitados a cada edición de los Premios Goya acuden en busca de ropajes que aúpen sus siluetas.

Sin desvelar nacionalidad, sexo o apenas detalles del vestido que lucirá el 6 de febrero, para Corberó, el juego esa noche no trata de ceñirse a la comodidad. "Da igual cómo sea el vestido, lo importante es que tú lo defiendas bien y te lo creas para que cree ese mismo efecto en las demás. El año pasado, al ser mi debut, iba más aniñada y quizás más discreta, pero este es el de la sensualidad. A fin de cuentas, mi personalidad es atrevida y algo descarada, no creo que ocultarla con un vestido de princesa de cuento vaya a ayudarme a estar más elegante". Para tal objetivo se ha aliado también con el maquillador Iván Gómez, asociado a firmas como Balmain y Chanel y responsable de la mayoría de los looks que esta luce en sus eventos y reportajes editoriales a lo largo del año. "Úrsula es enormemente impulsiva, ve algo y lo quiere o lo aborrece. Pero luego escucha muchísimo lo que le razonas, y se acaba atreviendo con algo que te había desechado en un primer momento. De ahí que sea la que más innova o adelanta algunas tendencias respecto a otras actrices", cuenta.

Ambos elaboran un punto de partida sobre el estilo que buscan y ponen en marcha diferentes conversaciones con diferentes diseñadores para que se ciñan a la intención de cada actriz. "Ahí es donde viene la complicación", cuenta Corberó. "Cada creador tiene su ADN y puede adaptarse a lo que le pides, pero eso no debería alejarse demasiado de la figura de mujer que él defiende". Esto suele tener ejemplos poco coherentes en los Oscar con actrices que modifican una prenda de pasarela hasta el opuesto, pero la opción que describe Úrsula es un territorio poco explorado por ahora en el caso español.

La noche de Goya no ha sido, históricamente, sinónimo de clase y elegancia en los resultados de alfombra roja. Hasta hace poco, de hecho, el gremio de intérpretes se sentía profundamente lejano a la industria de la moda y su músculo comercial, tan entendido y arropado desde hace décadas en Hollywood. La iniciativa puesta en marcha por la Academia cinco años atrás pretende, a través del asesoramiento del estilista Pepe Reyes (Isabel) o Tatiana Hernández, responsable de vestuario de 'El Niño' o 'Los amantes pasajeros', reconciliar la cita con la industria del lujo, añadiendo el intento de consolidar la presencia de moda nacional con un espacio de creaciones exclusivamente españolas. El proceso, según explica Reyes, empieza en el anuncio de televisión con el que promocionamos la gala, en este caso el de Dani Rovira y Penélope Cruz. Pero su trabajo en el showroom de la Academia empieza un mes y medio antes, cuando se anuncian los nominados. "Empezamos a buscar vestidos para ellos, trajes para ellos, y todo el atrezo que requiere la escenografía de la gala".

A pesar del profuso esfuerzo, los cálculos apuntan a que en total, de los 300 vestidos y 80 trajes masculinos que llegan al showroom durante el mes y medio que está instala, las actrices que elijan una pieza del espacio no será superior al 10%. "La influencia de Penélope Cruz, en mi opinión, es indiscutible. Si en una de las ediciones eligiera un diseño nacional, muchas la seguirían y eso repercutiría indudablemente en los años venideros", arguye. "Igual que usamos nuestra gala para promocionar nuestro cine, también podría ser muy útil para dar a conocer algunos de nuestros nombres en la industria de la moda". Vistas las proezas del celuloide patrio, que en 2015 vio su cuota de recaudación aumentado en un 19% superando los 100 millones de euros, parece haber estrellas inertes al paso del tiempo a todos los efectos.

Escrito por: Mario Ximenez
Foto: Luis Álvarez
Estilismo: Belén Rastrollo
Peluquería y maquillaje: Iván Gómez

Úrsula Corberó, la más elegante de los Premios Goya

$
0
0
Úrsula Corberó apareció ayer por la alfombra roja del Hotel Auditorium de Madrid con un elegantísimo diseño de Teresa Helbig: un vestido asimétrico burdeos de terciopelo y manga larga, con una raja interminable. Combinado con un collar de Cartier, sandalia en tono nude de Stuart Weitzman y un clutch en dorado de Salvatore Ferragamo, sorprendió a todos los fotógrafos y asistentes de la XXX Gala y se coronó como la mejor vestida de los Premios Goya.














Úrsula Corberó, fiel a Teresa Helbig en su desfile

$
0
0
Teresa Helbig ha presentado en esta tercera jornada de la MBFWM su nueva colección otoño/invierno. Úrsula Corberó, como fiel seguidora de la diseñadora española, no se ha querido perder su desfile y ha sido una de las invitadas más estilosas del front row. Úrsula Corberó ha optado por un vestido midi negro de Teresa Helbig, y ha completado su look total black con complementos de este mismo color.




Viewing all 36 articles
Browse latest View live